OBSERVAR ENTRE EL ASFALTO
Dos escritos y muchas ideas sueltas para plantear una
inquietud. Dos semanas se cumplen sin algo definido. Todo al parecer gira en
torno al concepto
“Innovación” entendido como un cúmulo de aprendizajes que se adaptan
al contexto y permiten procesos CREATIVOS, y poniéndolo en
contraste con el pensamiento Leonardesco.
Leonardo Da Vinci era un polímata adelantado a su época que
veía más allá de lo que un simple paisaje podía ofrecer. Cada elemento de la
naturaleza era objeto de estudios que parecían no tener fin, y así logró
transformar su entorno y dejar un legado de conocimientos que han contribuido a
la creación de objetos que hoy en día son de uso frecuente: Helicópteros,
Trajes y herramientas de buceo y hasta rodamientos. Dentro de mis procesos de creación
me hace falta ese modo de ver lo que se pretende plasmar sin caer en la
literalidad. Esta problemática ha rondado mi mente, y más aún desde que sé que
el atento ejercicio de observar abre posibilidades infinitas para salirse de
esa incómoda literalidad.
Para alguien que vive en medio del asfalto, respirando smog
y con más de 70 decibeles acompañando sus horas de descanso no es fácil encontrar
en su estado más puro elementos propios de la llamada “naturaleza”, esa que
sirvió de maestra al mencionado Leonardo.
Mucho antes de enfrentarme a este cambio de hábitat, pude
observar con cierta satisfacción, bandadas de cotorras carisucias en plena
avenida oriental en dos momentos del día: antes de las 6 de la mañana y a eso
de las 5 de la tarde. Me causaba asombro saber que todas ellas, al igual que
yo, se iban adaptando a este paisaje gris. Así mismo pude ver Guayacanes amarillos
y rosados, adornando con sus colores el día a día acelerado de quienes
transitan a su alrededor.
Ahora que una densa capa negra de material particulado contaminante
se adhiere a las plantas de mis pies cada vez que camino descalza en mi casa,
se me hace mas interesante ver como los árboles son habitantes silenciosos que poco
aire puro les queda para respirar. Todo esto trae de modo repetitivo la palabra
Adaptación.
“La vida tiende así a convertirse en una sucesión de fragmentos y la
identidad, sometida a cambios
constantes, sufre despistes y extravíos” (Verdú, 2003: 209)
Me aventuro entonces con mi teléfono móvil a registrar todo aquello que
me inquieta haciendo el ejercicio de la observación atenta y rigurosa. Luego
vendrán más preguntas movilizadoras que aclaren mi rumbo.


Comentarios
Publicar un comentario